NUEVA YORK – Tras la peor recesión global en décadas, los pronósticos privados y oficiales son cada vez más optimistas respecto de que la economía mundial tendrá una fuerte recuperación a partir de este año. Pero la expansión que viene no se distribuirá en forma pareja, ni entre los diversos países ni dentro de cada uno. Que la recuperación tenga forma de V (un regreso decidido a crecimiento por encima del potencial), de U (una versión más débil de la V) o de W (con recaída en la recesión) dependerá de varios factores según la economía y la región de que se trate.
NUEVA YORK – Tras la peor recesión global en décadas, los pronósticos privados y oficiales son cada vez más optimistas respecto de que la economía mundial tendrá una fuerte recuperación a partir de este año. Pero la expansión que viene no se distribuirá en forma pareja, ni entre los diversos países ni dentro de cada uno. Que la recuperación tenga forma de V (un regreso decidido a crecimiento por encima del potencial), de U (una versión más débil de la V) o de W (con recaída en la recesión) dependerá de varios factores según la economía y la región de que se trate.