SHANGHÁI – En enero pasado, el gobierno de China pronosticó que la economía del país –que, en ese momento, estaba experimentando un fuerte rebote después de la desaceleración inicial por la pandemia- crecería 5,5% en 2022. Pero, para el segundo trimestre, desafortunadamente, la propagación acelerada de la variante Ómicron del COVID-19 había obligado al gobierno a implementar medidas de confinamiento de emergencia en sus ciudades económicamente más dinámicas, entre ellas Beijing, Guangzhou, Shanghái y Shenzhen.
SHANGHÁI – En enero pasado, el gobierno de China pronosticó que la economía del país –que, en ese momento, estaba experimentando un fuerte rebote después de la desaceleración inicial por la pandemia- crecería 5,5% en 2022. Pero, para el segundo trimestre, desafortunadamente, la propagación acelerada de la variante Ómicron del COVID-19 había obligado al gobierno a implementar medidas de confinamiento de emergencia en sus ciudades económicamente más dinámicas, entre ellas Beijing, Guangzhou, Shanghái y Shenzhen.