DURHAM, CAROLINA DEL NORTE – Una de las partes más interesantes de mi trabajo como decano de una escuela de negocios son las conversaciones francas que suelo tener con líderes de diversas industrias. Hace algunos años vengo oyendo una frase preocupante: los dirigentes empresariales sienten que hoy comparten el tipo de desprestigio público que antes estaba reservado a los políticos.
DURHAM, CAROLINA DEL NORTE – Una de las partes más interesantes de mi trabajo como decano de una escuela de negocios son las conversaciones francas que suelo tener con líderes de diversas industrias. Hace algunos años vengo oyendo una frase preocupante: los dirigentes empresariales sienten que hoy comparten el tipo de desprestigio público que antes estaba reservado a los políticos.