VIENA – Como africano, mi sueño para la próxima década es ver que el continente produzca y venda chocolate a 300 millones de chinos, en lugar de exportar materias primas como el cacao. Hace varias semanas, en el Simposio Chino-Africano en Xiamen, China, puse a prueba esta visión frente a la audiencia y los más de 2.000 delegados se sumaron en un aplauso resonante. Los líderes empresariales y gubernamentales evidentemente están dispuestos a que África introduzca un cambio estructural destinado a crear economías nacionales basadas en la industria.
VIENA – Como africano, mi sueño para la próxima década es ver que el continente produzca y venda chocolate a 300 millones de chinos, en lugar de exportar materias primas como el cacao. Hace varias semanas, en el Simposio Chino-Africano en Xiamen, China, puse a prueba esta visión frente a la audiencia y los más de 2.000 delegados se sumaron en un aplauso resonante. Los líderes empresariales y gubernamentales evidentemente están dispuestos a que África introduzca un cambio estructural destinado a crear economías nacionales basadas en la industria.