NUEVA DELHI – Las tensiones en aumento con Japón, Vietnam y Filipinas en torno a las islas del mar de China Meridional y el mar de China Oriental no han impedido que una China cada vez más enérgica inicie otro frente mediante una incursión militar en la disputada e imponente frontera himalaya. En la noche del 15 de abril, un pelotón del Ejército Popular de Liberación (PLA, por sus siglas en inglés) entró sigilosamente cerca de la triple frontera entre China, India y Pakistán, estableció un campamento 19 kilómetros dentro del territorio controlado por India, y dejó al gobierno indio ante la potencial pérdida de un altiplano vital y estratégico de 750 kilómetros cuadrados.
NUEVA DELHI – Las tensiones en aumento con Japón, Vietnam y Filipinas en torno a las islas del mar de China Meridional y el mar de China Oriental no han impedido que una China cada vez más enérgica inicie otro frente mediante una incursión militar en la disputada e imponente frontera himalaya. En la noche del 15 de abril, un pelotón del Ejército Popular de Liberación (PLA, por sus siglas en inglés) entró sigilosamente cerca de la triple frontera entre China, India y Pakistán, estableció un campamento 19 kilómetros dentro del territorio controlado por India, y dejó al gobierno indio ante la potencial pérdida de un altiplano vital y estratégico de 750 kilómetros cuadrados.