BISHKEK – Nunca hubo en el mundo tanta deuda como hoy. Con tipos de interés tan bajos por tanto tiempo, quien podía endeudarse, lo hizo. Pero a pesar de lo ínfimo de los costos financieros, las consecuencias económicas de la pandemia han forzado a diversos países vulnerables a declarar uno tras otro el default soberano (o dar señales de su inminencia). Para colmo, el principal acreedor de las economías emergentes con problemas de deuda (China) tiene poca experiencia sobre cómo manejar una cadena de impagos de deuda soberana.
BISHKEK – Nunca hubo en el mundo tanta deuda como hoy. Con tipos de interés tan bajos por tanto tiempo, quien podía endeudarse, lo hizo. Pero a pesar de lo ínfimo de los costos financieros, las consecuencias económicas de la pandemia han forzado a diversos países vulnerables a declarar uno tras otro el default soberano (o dar señales de su inminencia). Para colmo, el principal acreedor de las economías emergentes con problemas de deuda (China) tiene poca experiencia sobre cómo manejar una cadena de impagos de deuda soberana.