SHANGHAI – En 1958, el año del fracasado "Gran Salto hacia Adelante" de China, el Camarada Mao tenía grandes planes para la industria del acero. Si bien la producción había sido de apenas un poco más de cinco millones de toneladas en 1957, esperaba que el país alcanzara o incluso superara a los Estados Unidos para 1962, produciendo entre 80 y 100 millones de toneladas por año, y llegara a los 700 millones de toneladas por año a mediados de los años 70, convirtiendo así al país en el líder mundial indiscutido. Todo esto se debía lograr utilizando "hornos de patio trasero", manejados por gente común y corriente sin especialización técnica.
SHANGHAI – En 1958, el año del fracasado "Gran Salto hacia Adelante" de China, el Camarada Mao tenía grandes planes para la industria del acero. Si bien la producción había sido de apenas un poco más de cinco millones de toneladas en 1957, esperaba que el país alcanzara o incluso superara a los Estados Unidos para 1962, produciendo entre 80 y 100 millones de toneladas por año, y llegara a los 700 millones de toneladas por año a mediados de los años 70, convirtiendo así al país en el líder mundial indiscutido. Todo esto se debía lograr utilizando "hornos de patio trasero", manejados por gente común y corriente sin especialización técnica.