LONDRES – Dentro de unos días, el presidente chino Xi Jinping encabezará una reunión con muchos de los líderes de los 65 países que participan de la iniciativa “Cinturón y ruta de la seda” (OBOR, por la sigla en inglés), un revolucionario programa que canalizará inversiones por miles de millones de dólares a proyectos de infraestructura en Asia, África y Europa. El proyecto se apoya en sólidos argumentos económicos, pero ha generado reacciones ambiguas.
LONDRES – Dentro de unos días, el presidente chino Xi Jinping encabezará una reunión con muchos de los líderes de los 65 países que participan de la iniciativa “Cinturón y ruta de la seda” (OBOR, por la sigla en inglés), un revolucionario programa que canalizará inversiones por miles de millones de dólares a proyectos de infraestructura en Asia, África y Europa. El proyecto se apoya en sólidos argumentos económicos, pero ha generado reacciones ambiguas.