HONG KONG – En las últimas cuatro décadas, China ha pasado de ser un proveedor de salarios bajos a convertirse en uno de los tres eslabones más importantes en la cadena de valor global, junto con Estados Unidos y Alemania. A pesar de los crecientes temores sobre la deuda corporativa de China -que ahora está cerca del 170% del PIB- y su capacidad para eludir la trampa del ingreso medio, la rápida digitalización le permitirá a la economía china seguir ascendiendo en la cadena de valor.
HONG KONG – En las últimas cuatro décadas, China ha pasado de ser un proveedor de salarios bajos a convertirse en uno de los tres eslabones más importantes en la cadena de valor global, junto con Estados Unidos y Alemania. A pesar de los crecientes temores sobre la deuda corporativa de China -que ahora está cerca del 170% del PIB- y su capacidad para eludir la trampa del ingreso medio, la rápida digitalización le permitirá a la economía china seguir ascendiendo en la cadena de valor.