SHANGAI.- La última superpotencia rival de los Estados Unidos, la Unión Soviética, se colapsó en 1991. Pero, aparte de su fuerza militar, la URSS realmente nunca fue tan poderosa como para ser un contrapeso de la influencia estadounidense. A finales de la década de los ochenta, parecía que Japón podría desafiar el liderazgo industrial de los Estados Unidos, pero para los años noventa había perdido su ventaja competitiva. China quisiera ser una fuerza central en un mundo multipolar, pero se lo ha impedido su falta de fortaleza general . Ante esta realidad, China ve en la Unión Europea, que se expande cada vez más, un posible contrapeso del poder irrestricto de los Estados Unidos.
SHANGAI.- La última superpotencia rival de los Estados Unidos, la Unión Soviética, se colapsó en 1991. Pero, aparte de su fuerza militar, la URSS realmente nunca fue tan poderosa como para ser un contrapeso de la influencia estadounidense. A finales de la década de los ochenta, parecía que Japón podría desafiar el liderazgo industrial de los Estados Unidos, pero para los años noventa había perdido su ventaja competitiva. China quisiera ser una fuerza central en un mundo multipolar, pero se lo ha impedido su falta de fortaleza general . Ante esta realidad, China ve en la Unión Europea, que se expande cada vez más, un posible contrapeso del poder irrestricto de los Estados Unidos.