CAMBRIDGE – Como China va a encabezar una nueva entidad financiera internacional con un capital de 50.000 millones de dólares, el Banco Asiático de Inversiones en Infraestructuras (BAII), la mayor parte del debate se ha centrado en los fútiles intentos de los Estados Unidos de desanimar a otras economías avanzadas para que no se unan a él. Se ha dedicado demasiado poca atención a entender por qué los préstamos multilaterales para el desarrollo han fallado con tanta frecuencia y qué se podría hacer para que dieran mejores resultados.
CAMBRIDGE – Como China va a encabezar una nueva entidad financiera internacional con un capital de 50.000 millones de dólares, el Banco Asiático de Inversiones en Infraestructuras (BAII), la mayor parte del debate se ha centrado en los fútiles intentos de los Estados Unidos de desanimar a otras economías avanzadas para que no se unan a él. Se ha dedicado demasiado poca atención a entender por qué los préstamos multilaterales para el desarrollo han fallado con tanta frecuencia y qué se podría hacer para que dieran mejores resultados.