Después de dos años de una intermitente política de la cuerda floja, la India y el Pakistán vuelven a hablar sobre la forma de resolver sus diferencias, en lugar de lanzar amenazas y bravuconadas nucleares, pero, ¿tienen las conversaciones ahora en curso más posibilidades de éxito que las innumerables negociaciones fracasadas que han caracterizado los cincuenta últimos años?
Después de dos años de una intermitente política de la cuerda floja, la India y el Pakistán vuelven a hablar sobre la forma de resolver sus diferencias, en lugar de lanzar amenazas y bravuconadas nucleares, pero, ¿tienen las conversaciones ahora en curso más posibilidades de éxito que las innumerables negociaciones fracasadas que han caracterizado los cincuenta últimos años?