STANFORD – Mientras que problemas fiscales plagan a los gobiernos centrales en muchas economías, una crisis paralela envuelve a muchos gobiernos subnacionales en todo el mundo. Desde España a China a los Estados Unidos e Italia, los gobiernos de regiones, Estados, provincias, ciudades y pueblos se enfrentan a enormes desafíos fiscales. Los niveles gubernamentales superiores están “agarrados por el cuello”, es decir no tienen otra salida, que rescatar a los gobiernos locales insolventes, e incluso pueden sufrir rebajas en la calificación de sus bonos como consecuencia de ello; en España, Italia y China, ese papel corresponde al gobierno nacional, y, en el caso de las ciudades y pueblos de los Estados Unidos dicho papel corresponde a los Estados en los que se encuentran.
STANFORD – Mientras que problemas fiscales plagan a los gobiernos centrales en muchas economías, una crisis paralela envuelve a muchos gobiernos subnacionales en todo el mundo. Desde España a China a los Estados Unidos e Italia, los gobiernos de regiones, Estados, provincias, ciudades y pueblos se enfrentan a enormes desafíos fiscales. Los niveles gubernamentales superiores están “agarrados por el cuello”, es decir no tienen otra salida, que rescatar a los gobiernos locales insolventes, e incluso pueden sufrir rebajas en la calificación de sus bonos como consecuencia de ello; en España, Italia y China, ese papel corresponde al gobierno nacional, y, en el caso de las ciudades y pueblos de los Estados Unidos dicho papel corresponde a los Estados en los que se encuentran.