BERLÍN – Sería un gran error que Occidente desestime la reciente cumbre de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) en Kazán, la «capital islámica» extraoficial de Rusia, como una mera distracción antioccidental. Aunque a los gobiernos occidentales les gustaría creer que el encuentro mostró falta de unidad y sustancia, la realidad es más complicada.
BERLÍN – Sería un gran error que Occidente desestime la reciente cumbre de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) en Kazán, la «capital islámica» extraoficial de Rusia, como una mera distracción antioccidental. Aunque a los gobiernos occidentales les gustaría creer que el encuentro mostró falta de unidad y sustancia, la realidad es más complicada.