MILÁN – Está claro que en el último decenio, a Estados Unidos le ha ido mucho mejor que a la mayoría de las otras economías avanzadas. Como han reconocido muchos (incluido el ex presidente del Banco Central Europeo y ex primer ministro italiano, Mario Draghi, en su influyente informe sobre la competitividad europea), el desempeño «excepcional» de Estados Unidos se debe en buena medida al dominio que tienen las grandes empresas estadounidenses en alta tecnología. Pero el sector manufacturero, en cambio, experimenta dificultades.
MILÁN – Está claro que en el último decenio, a Estados Unidos le ha ido mucho mejor que a la mayoría de las otras economías avanzadas. Como han reconocido muchos (incluido el ex presidente del Banco Central Europeo y ex primer ministro italiano, Mario Draghi, en su influyente informe sobre la competitividad europea), el desempeño «excepcional» de Estados Unidos se debe en buena medida al dominio que tienen las grandes empresas estadounidenses en alta tecnología. Pero el sector manufacturero, en cambio, experimenta dificultades.