NUEVA YORK – No hace falta ser un genio para darse cuenta de que el sistema financiero de Estados Unidos –de hecho, las finanzas globales- está en un estado de caos. Y ahora, después de que la Cámara de Representantes de Estados Unidos rechazó el plan de rescate de 700.000 millones de dólares propuesto por la administración Bush, también resulta obvio que no existe un consenso sobre cómo repararlo.
NUEVA YORK – No hace falta ser un genio para darse cuenta de que el sistema financiero de Estados Unidos –de hecho, las finanzas globales- está en un estado de caos. Y ahora, después de que la Cámara de Representantes de Estados Unidos rechazó el plan de rescate de 700.000 millones de dólares propuesto por la administración Bush, también resulta obvio que no existe un consenso sobre cómo repararlo.