Los médicos utilizan la palabra “crisis” para describir el punto en el que el paciente o empieza a recuperarse o muere. El paciente iraquí del presidente George W. Bush parece haber llegado a ese punto. La mayoría de los comentaristas parecen opinar que la última receta de Bush –un aumento de 20,000 soldados adicionales para aplastar a las milicias de Bagdad—en el mejor de los casos sólo pospondrá la muerte inevitable de su sueño de un Iraq democrático. Con todo, ciertos factores que están más allá del control de Bush y que él no creó (al menos no de manera intencional) podrían terminar por salvar a Iraq de la fatalidad.
Los médicos utilizan la palabra “crisis” para describir el punto en el que el paciente o empieza a recuperarse o muere. El paciente iraquí del presidente George W. Bush parece haber llegado a ese punto. La mayoría de los comentaristas parecen opinar que la última receta de Bush –un aumento de 20,000 soldados adicionales para aplastar a las milicias de Bagdad—en el mejor de los casos sólo pospondrá la muerte inevitable de su sueño de un Iraq democrático. Con todo, ciertos factores que están más allá del control de Bush y que él no creó (al menos no de manera intencional) podrían terminar por salvar a Iraq de la fatalidad.