NUEVA YORK – Estados Unidos siempre se consideró a sí mismo un bastión de la democracia. La promovió en todo el mundo, y luchó por ella (con gran costo) contra el fascismo en Europa durante la Segunda Guerra Mundial. Ahora esa lucha se trasladó al propio país.
NUEVA YORK – Estados Unidos siempre se consideró a sí mismo un bastión de la democracia. La promovió en todo el mundo, y luchó por ella (con gran costo) contra el fascismo en Europa durante la Segunda Guerra Mundial. Ahora esa lucha se trasladó al propio país.