NUEVA YORK – La crisis económica y política de los Estados Unidos va a agravarse a raíz de las próximas elecciones de noviembre. El Presidente Barack Obama perderá todas las esperanzas de aprobar una legislación progresista en pro de los pobres o del medio ambiente. De hecho, es probable que todas las leyes y las reformas queden paralizadas hasta 2013, con ocasión de unas nuevas elecciones presidenciales, y también que empeore una situación mala caracterizada por el punto muerto y la causticidad, por lo que el mundo no debe esperar demasiada capacidad de dirección por parte de unos Estados Unidos enconadamente divididos.
NUEVA YORK – La crisis económica y política de los Estados Unidos va a agravarse a raíz de las próximas elecciones de noviembre. El Presidente Barack Obama perderá todas las esperanzas de aprobar una legislación progresista en pro de los pobres o del medio ambiente. De hecho, es probable que todas las leyes y las reformas queden paralizadas hasta 2013, con ocasión de unas nuevas elecciones presidenciales, y también que empeore una situación mala caracterizada por el punto muerto y la causticidad, por lo que el mundo no debe esperar demasiada capacidad de dirección por parte de unos Estados Unidos enconadamente divididos.