El 16 de abril, más de 300 mujeres afganas –muchas de ellas estudiantes—realizaron una marcha en Kabul para protestar por una nueva ley aprobada por el Parlamento que impondría una serie de restricciones al estilo talibán para ellas. La ley permitiría la violación marital, limitaría la libertad de movimiento de las mujeres –por ejemplo, para trabajar o estudiar—sin el consentimiento de un hombre e incluso declararía ilegal que se negaran a vestirse según los deseos de su marido.
El 16 de abril, más de 300 mujeres afganas –muchas de ellas estudiantes—realizaron una marcha en Kabul para protestar por una nueva ley aprobada por el Parlamento que impondría una serie de restricciones al estilo talibán para ellas. La ley permitiría la violación marital, limitaría la libertad de movimiento de las mujeres –por ejemplo, para trabajar o estudiar—sin el consentimiento de un hombre e incluso declararía ilegal que se negaran a vestirse según los deseos de su marido.