BERKELEY – Para ser una burbuja, no fue muy grande. De 2002 a 2006, la proporción de la economía americana dedicada a la construcción de viviendas aumentó en 1,2 puntos porcentuales del PIB por encima de su anterior tendencia de valor, antes de desplomarse cuando los Estados Unidos entraron en la mayor crisis económica en casi un siglo. Según mis cálculos aproximados, el exceso de inversión en el sector de la vivienda durante ese período ascendió en total a unos 500.000 millones de dólares: desde cualquier punto de vista, una pequeña fracción de la economía mundial en el momento del desplome.
BERKELEY – Para ser una burbuja, no fue muy grande. De 2002 a 2006, la proporción de la economía americana dedicada a la construcción de viviendas aumentó en 1,2 puntos porcentuales del PIB por encima de su anterior tendencia de valor, antes de desplomarse cuando los Estados Unidos entraron en la mayor crisis económica en casi un siglo. Según mis cálculos aproximados, el exceso de inversión en el sector de la vivienda durante ese período ascendió en total a unos 500.000 millones de dólares: desde cualquier punto de vista, una pequeña fracción de la economía mundial en el momento del desplome.