CAMBRIDGE – Hacía tiempo que un debate entre economistas académicos no atraía tanto el interés de la prensa convencional como la seguidilla entre Carmen Reinhart y Kenneth Rogoff por un lado, y Paul Krugman por otro. De hecho, se ha convertido incluso en pasto para las comedias televisivas.
CAMBRIDGE – Hacía tiempo que un debate entre economistas académicos no atraía tanto el interés de la prensa convencional como la seguidilla entre Carmen Reinhart y Kenneth Rogoff por un lado, y Paul Krugman por otro. De hecho, se ha convertido incluso en pasto para las comedias televisivas.