CAMBRIDGE – Cuando el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, anunció a finales de enero su intención de establecer nuevas reglas más estrictas para los bancos, no esperaba con ello conseguir amigos en Wall Street. De ahora en adelante vamos a impedir que los bancos comercien por propia cuenta y crezcan demasiado, decía Obama. La batalla interna en su administración la parecía haber ganado Paul Volcker, el franco e impresionante ex presidente de la Reserva Federal que durante mucho tiempo ha sido crítico de la innovación financiera.
CAMBRIDGE – Cuando el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, anunció a finales de enero su intención de establecer nuevas reglas más estrictas para los bancos, no esperaba con ello conseguir amigos en Wall Street. De ahora en adelante vamos a impedir que los bancos comercien por propia cuenta y crezcan demasiado, decía Obama. La batalla interna en su administración la parecía haber ganado Paul Volcker, el franco e impresionante ex presidente de la Reserva Federal que durante mucho tiempo ha sido crítico de la innovación financiera.