SINGAPUR − Cuando la agitación actual que rodea a las elecciones iraníes finalmente termine, Occidente probablemente se aleje habiendo hecho un simple juicio en blanco y negro: ganaron los malos. Por supuesto, Occidente hizo lo correcto al respaldar a los buenos, los manifestantes callejeros. En consecuencia, Occidente no necesita cargar con ninguna responsabilidad por el resultado.
SINGAPUR − Cuando la agitación actual que rodea a las elecciones iraníes finalmente termine, Occidente probablemente se aleje habiendo hecho un simple juicio en blanco y negro: ganaron los malos. Por supuesto, Occidente hizo lo correcto al respaldar a los buenos, los manifestantes callejeros. En consecuencia, Occidente no necesita cargar con ninguna responsabilidad por el resultado.