Después de las pensiones y la atención a la salud, la educación es el tercer servicio público importante que se encuentra en graves aprietos en muchos países, principalmente en Europa. La orgullosa Alemania, inventora del sistema moderno de universidades que el mundo conoce actualmente, ve ahora que sus estudiantes ocupan los últimos lugares en pruebas de conocimientos y competencia. La naturaleza del problema en la educación superior es similar al que afecta a todos los servicios públicos: un crecimiento enorme de la demanda que las arcas públicas ya no pueden cubrir.
Después de las pensiones y la atención a la salud, la educación es el tercer servicio público importante que se encuentra en graves aprietos en muchos países, principalmente en Europa. La orgullosa Alemania, inventora del sistema moderno de universidades que el mundo conoce actualmente, ve ahora que sus estudiantes ocupan los últimos lugares en pruebas de conocimientos y competencia. La naturaleza del problema en la educación superior es similar al que afecta a todos los servicios públicos: un crecimiento enorme de la demanda que las arcas públicas ya no pueden cubrir.