BEIJING – Todos los países de bajos ingresos tienen el potencial de lograr un dinámico crecimiento económico. Lo sabemos porque hemos visto el fenómeno repetidas veces: una economía pobre, agrícola se transforma en una economía de ingreso medio –o incluso alto– en una o dos generaciones. La clave es aprovechar la oportunidad de industrialización derivada de la deslocalización de manufactura ligera de los países de más altos ingresos. Así fue en los siglos XIX y XX, y sigue vigente.
BEIJING – Todos los países de bajos ingresos tienen el potencial de lograr un dinámico crecimiento económico. Lo sabemos porque hemos visto el fenómeno repetidas veces: una economía pobre, agrícola se transforma en una economía de ingreso medio –o incluso alto– en una o dos generaciones. La clave es aprovechar la oportunidad de industrialización derivada de la deslocalización de manufactura ligera de los países de más altos ingresos. Así fue en los siglos XIX y XX, y sigue vigente.